Asegura que al PP-A le "sobra" IULV-CA porque esta fuerza política defiende la educación y la sanidad pública y los servicios sociales
SEVILLA, 11 Mar. (EUROPA PRESS) -
El coordinador general de IULV-CA, Antonio Maíllo, ha asegurado este martes que la presidenta de la Junta, Susana Díaz, es "libre" para reunirse "con quien quiera, como cualquier otro representante político", si bien ha considerado que para el diálogo entre los grupos políticos está el Parlamento de Andalucía, "un Parlamento del que forma parte IULV-CA porque así lo quiere una parte de la sociedad andaluza".
Así se ha pronunciado Maíllo en rueda de prensa, en relación a la reunión celebrada este lunes entre la presidenta de la Junta y el nuevo líder del PP-A, Juan Manuel Moreno, quien ha manifestado que el diálogo sobre los asuntos prioritarios debe circunscribirse a las dos grandes formaciones políticas de la comunidad.
En este contexto, el máximo dirigente de la federación de izquierdas ha insistido en que IULV-CA no sólo está representada en el Parlamento, "sino que forma parte de un gobierno cuyas medidas a desarrollar están ancladas en el acuerdo de gobierno programático alcanzado entre PSOE-A e IULV-CA".
En su opinión, al PP-A le sobra la federación de izquierdas porque ésta defiende la educación pública, la sanidad pública, los servicios sociales, la banca pública o un cambio en las políticas de ingreso. "Le sobra lo que representa IULV-CA", ha añadido Maíllo, quien cree que Moreno demuestra con este posicionamiento "su verdadero rostro, el de una derecha muy dura en Andalucía".
"INCOMPATIBILIDAD POLÍTICA" CON EL PP-A
El líder de IULV-CA, que ha reconocido que su organización tiene "muchas dificultades" en el diálogo con el PP-A, fruto de una "incompatibilidad política", ha insistido en que con la hoja de ruta que el PP ha llevado a cabo en las comunidades que gobierna "no hay diálogo". Maíllo se refería así al "cierre de colegios rurales, centros de salud, casas de acogida de mujeres víctimas de violencia de género o despido masivo de empleo público".
No obstante, el coordinador general de IULV-CA, Antonio Maíllo, se ha mostrado dispuesto a retomar la mesa de diálogo en el Parlamento entre las distintas fuerzas políticas, siempre que sea para lograr "resultados" y no para "perder el tiempo", asegurando que está "harto" de "acciones formales voluntaristas" que no llegan a ninguna conclusión y que sólo generan expectativas que terminan derivando en "frustración" para la ciudadanía.
El dirigente de izquierdas ha dicho que IULV-CA no se va a negar a retomar el diálogo, pero ha considerado necesario que "se pongan las cartas sobre la mesa" y que nadie "juegue" con el diálogo para lograr espacios en los medios de comunicación y luego "no llegar a nada" en relación a los posibles acuerdos. En este sentido, ha pedido que se haga una reflexión sobre la "seriedad" con la que se deben afrontar los pactos y el diálogo.
Si bien, preguntado sobre si la federación de izquierdas cree posible alcanzar acuerdos en materia de empleo con el PP-A, Maíllo ha afirmado que el nuevo presidente de este partido tendría que hablar mejor sobre este asunto con su "tutor", Mariano Rajoy, "para que se moje y se defina sobre las políticas de empleo en Andalucía", después de haberse "cebado" con esta comunidad en los recortes a la políticas activas.
"POLÍTICA DE FOTOGRAFÍA Y SONRISA VACUA"
Sobre el encuentro como tal entre Díaz y Moreno, ha dicho que "la política de fotografía y de sonrisa vacua" forma parte de una visión de la política que IULV-CA no comparte. Ha recordado que él se reunió con el expresidente de la Junta José Antonio Griñán, una semana después de ser elegido coordinador general de IULV-CA, pero no se realizó ninguna fotografía porque fue un encuentro "discreto".
"Me gusta el trabajo concreto con resultados", ha aseverado Maíllo, quien ha advertido de que "la gente lo está pasando muy mal como que todo se ventile en torno a sonrisas que fuera de la cortesía no tienen ninguna traducción en contenido y soluciones de problemas, por lo que menos fotos y más trabajo".
Finalmente, ha dicho también que si él fuera presidente de la Junta, en vez de recibir a Moreno en el Palacio de San Telmo, lo hubiera llevado a una reunión con los trabajadores de ayuda a domicilio para que le expliquen las "políticas de recortes" que el nuevo presidente del PP-A llevó a cabo durante los años 2012 y 2013 desde la Secretaría de Estado de Política Social e Igualdad.
