Pizarro expresa su "máximo respeto" a la sentencia del TS que ratificó la multa de 1.500 euros al juez Tirado

Actualizado: miércoles, 5 mayo 2010 16:22

SEVILLA, 5 May. (EUROPA PRESS) -

El consejero de Gobernación y Justicia, Luis Pizarro, expresó hoy su respeto "absoluto y máximo" a la sentencia por la que el Tribunal Supremo confirmó la multa de 1.500 euros al juez de lo Penal número 1 de Sevilla Rafael Tirado por el retraso a la hora de ejecutar una condena de prisión por abusos que fue dictada contra el presunto asesino de la niña Mari Luz Cortés, Santiago del Valle, sentencia en la cual además se critica la "pasividad" del fiscal y la Junta en el caso.

A preguntas de los periodistas en Sevilla tras participar en el homenaje a los ciudadanos de la provincia que fallecieron en el campo de exterminio de Mauthausen, Pizarro indicó que, "cuando se produce un pronunciamiento de algún tribunal, la respuesta es siempre la misma, como es el máximo respecto a las decisiones que se toman en los órganos judiciales".

Al hilo de ello, el responsable del ramo puso de manifiesto que "se ha producido una resolución", en referencia al fallo de la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Supremo, en la cual "se manifiesta que ha habido deficiencias en todos los operadores judiciales, también en la Junta de Andalucía", pero únicamente queda "acatar y respetar" esa sentencia.

El Tribunal Supremo, que señala que la actitud de Tirado permitió que Del Valle no comenzara el cumplimiento ejecutivo de una pena por abusos a una menor hasta transcurridos dos años, dos meses y nueve días desde que se incoara el procedimiento ejecutorio, también reconoce la existencia de otros factores que contribuyeron al retraso, sin excluir la responsabilidad del juez.

Entre ellos, que el expediente permaneciera por distintos motivos sin funcionario; el nombramiento de una funcionaria interina sin experiencia; la pasividad de las partes acusadoras en el procedimiento o el volumen de asuntos sometidos al conocimiento del Juzgado. Esta última circunstancia "resulta incompatible con el adecuado y sereno ejercicio de la compleja función jurisdiccional", según reconoce el Tribunal Supremo.