La Junta invertirá 421 millones en más de 5.000 kilómetros de carril bici

Elena Cortés, este martes
Elena Cortés, este martes - EUROPA PRESS/JUNTA DE ANDALUCÍA
Actualizado: martes, 21 enero 2014 17:48

SEVILLA, 21 Ene. (EUROPA PRESS) -

   El Consejo de Gobierno ha aprobado este martes el Plan Andaluz de la Bicicleta (PAB) 2014-2020, que prevé el diseño de una red de más de 5.139 kilómetros de vías ciclistas en la comunidad autónoma. La nueva estrategia, que supondrá la creación de 15.000 empleos y unas inversiones autonómicas y municipales de 421,47 millones de euros, plantea como principal objetivo situar a Andalucía en la media europea de utilización de este medio de transporte clave para las políticas de movilidad sostenible.

   El documento da cumplimiento a los compromisos adquiridos por Andalucía con los programas y estrategias para luchar contra el cambio climático, disminuir la emisión de gases de efecto invernadero, promover el crecimiento sostenible y la economía verde y avanzar hacia un nuevo modelo productivo, según ha expuesto la consejera de Fomento y Vivienda, Elena Cortés, en la rueda de prensa posterior a la reunión del Consejo de Gobierno.

   La inversión total prevista hasta 2020 incluye 180,03 millones de euros en vías urbanas, 171,29 en las metropolitanas y 69,65 en las de carácter autonómico. Esto supone 20 millones de euros más que los recogidos en el borrador del Plan, tras las aportaciones ciudadanas durante el periodo de información pública. En este incremento se contemplan los 500.000 euros para aparcamientos de bicicletas ligadas a vías ciclistas en el ámbito urbano.

   La Consejería de Fomento y Vivienda, que ha presupuestado 18 millones de euros en 2014 para vías ciclistas, aporta un 75 por ciento de la inversión necesaria para las vías urbanas, mientras que los ayuntamientos dedicarán el 25 por ciento restante a través de convenios de colaboración. En la financiación desempeñan un papel fundamental los fondos europeos, que en su marco 2014-2020 sitúan como prioridad la movilidad sostenible en sus políticas de transporte, a las que dedica 26.300 millones de euros, según ha expuesto la consejera.

   Cortés, que ha apuntado que se trata de trasladar el modelo de "éxito" de Sevilla al conjunto de grandes ciudades andaluzas, ha confiado en que los ayuntamientos estén dispuestos a colaborar para dar ese paso importantísimo. Ha apuntado que desde hace meses, la Junta viene manteniendo intensos contactos técnicos y políticos con los consistorios para abordar la firma de los convenios, algo que ha confiado en que se produzca con "celeridad".

   El Plan prevé 2.059 kilómetros de vías ciclistas en las áreas metropolitanas de las ocho capitales de provincia, Jerez de la Frontera y Algeciras (ambas en la provincia de Cádiz), y 3.080 kilómetros en el resto de la comunidad a partir de vías pecuarias y caminos rurales.

   En las citadas urbes, se construirán 312,7 nuevos kilómetros de vías ciclistas, que se sumarán a los 350,5 ya existentes. Igualmente, recoge la creación de 837,92 kilómetros de vías en las áreas metropolitanas de estas urbes, donde ya hay 558. No obstante, el documento está abierto a la incorporación de otros municipios de más de 20.000 habitantes.

   El PAB incluye 86,16 kilómetros más que el primer borrador presentado, tras las aportaciones de la sociedad civil en el proceso participativo previo.

   En el ámbito urbano y metropolitano, el Plan plantea que un 10 por ciento de los desplazamientos cotidianos en ciudad se realice en bicicleta, con el objetivo de que este medio se convierta en una alternativa real al coche. En el caso de Sevilla, que ya roza ese umbral, se situará en el 15 por ciento. La cuota media de la Unión Europea de uso de la bicicleta con respecto al total de desplazamientos es del 7,4 por ciento, con lo que el documento pretende que Andalucía no solo alcance sino que supere estos niveles.

   Por su parte, las vías autonómicas están más orientadas a la práctica del cicloturismo, el ocio y el deporte. Las vías urbanas y metropolitanas recogidas en el Plan se reparten en 91,3 kilómetros nuevos de Almería, que se suman a los 77,1 existentes; la Bahía de Cádiz, que integra a Jerez de la Frontera y la capital, aglutina 148,5 kilómetros nuevos y 167,5 ya diseñados; en el Campo de Gibraltar, tomando como área urbana de desarrollo la ciudad de Algeciras, el PAB prevé 128,9 kilómetros de nueva creación, que se sumarán a los 54,7 anteriores, y el total para Córdoba es de 109,9, de los que 65 ya están habilitados.

   Los 62,9 kilómetros de Granada y su área se ven complementados por 105,1 en el nuevo Plan, para un total de 168; en Huelva y su corona el documento compromete 197,7 kilómetros, que se sumarán a los 126,7 ya existentes; Jaén tiene 18,1 kilómetros y pasará a tener 54,6, ya que el documento recoge 36,5 nuevos; Málaga pasará de 92,9 a 247,9 kilómetros y, por último, en Sevilla y su área metropolitana hay 243,8, y se crearán 242,4 más.

VÍAS EN EL MEDIO RURAL

   Además de estas vías de índole urbana y metropolitana, el PAB recoge 3.080 kilómetros de vías de carácter autonómico, en su mayoría (2.625) ya existentes sobre el trazado de vías pecuarias y caminos rurales, por lo que las actuaciones programadas van dirigidas a su adecuación, señalización y conexión. Los ocho ejes autonómicos previstos, que recorren Andalucía de este a oeste y de norte a sur, son: Sierra Morena, Guadalquivir,  Campiña-Subbética, Sur, Litoral, Sierra de Huelva-Campo de Gibraltar,  Genil-Costa del Sol y Cazorla-Carboneras.

   En cuanto a los 15.000 puestos de trabajo que se crearán, 7.792 están relacionados con la construcción y mantenimiento de las vías ciclistas, y el resto con la actividad asociada al sector turístico, la fabricación y la reparación de bicicletas, así como al comercio y los servicios vinculados.

   El plan se desarrollará en dos fases, la primera, entre 2014 y 2017, prevé la construcción de una red básica de vías ciclistas en las capitales andaluzas, Algeciras y Jerez de la Frontera, así como en sus áreas metropolitanas, y la segunda fase, entre 2018 y 2020, dedicará el esfuerzo inversor fundamentalmente a la red autonómica.

   El PAB recoge que un año después de su pleno desarrollo los beneficios asociados superarán a la inversión, con un ahorro anual de 413 millones de euros en gasto sanitario y en transporte, por disminución del consumo energético y de emisiones contaminantes y por reducción del absentismo.