NUEVA DELHI, 15 Jun. (EP/AP) -
La Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) no rebajará su actual techo de producción hasta que los precios se estabilicen, declaró hoy el secretario general del cartel y ministro kuwaití de crudo, Sheik Ahmed al-Fahd al-Sabah.
La cuota oficial de producción de la OPEP se ha mantenido inalterada en 28 millones de barriles diarios desde julio de 2005. El secretario del organismo internacional, de visita oficial en la India, no ve movimientos para cambiar ese nivel.
"Aunque el mercado estaba sobreabastecido y había un suministro en exceso de más de 1,5 millones de barriles, los miembros de la OPEP mantuvieron su producción", dijo Sheik Ahmed, en referencia a las dos últimas reuniones de la organización. "Siempre diseñaremos nuestra estrategia para seguir asegurando el suministro al mercado y tener precios estables", agregó. El próximo encuentro de la OPEP está programado para el 11 de septiembre en Viena.
El secretario general de la OPEP añadió que la situación en Irán e Irak tendrá un papel clave en la determinación de los precios del crudo en los próximos meses. "Creo que los (altos) precios están todavía relacionados con la situación geopolítica, y esperamos que, a través de la comprensión mutua, se resuelvan algunos de los problemas en Oriente Medio... y ayudar a la estabilidad de los precios", declaró.
La incertidumbre acerca de los fenómenos meteorológicos en Estados Unidos es también un factor, pero el ministro señaló que espera que la demanda invernal se reduzca, y ello ayude a estabilizar los precios.
Por ahora, según Sheik Ahmed, los precios "seguirán a un nivel de entre 65 y 70 dólares el barril".
Los futuros se elevaron hoy por segundo día, después de que los datos del Gobierno estadounidense reflejaran una caída mayor de lo previsto de las reservas de ese país. El crudo ligero para entrega en julio se encareció 36 centavos, hasta 69,50 dólares el barril, en el mercado electrónico de Nueva York. Mientras, el Brent para julio subía 29 centavos en Londres, hasta los 67,27 dólares el barril.
Los precios son ahora alrededor de un 23% más caros que hace un año, como consecuencia de que los productores están bombeando casi tanto como pueden para satisfacer la demanda diaria.
