Actualizado 14/03/2006 14:55

RSC.-Ecologistas en Acción solicita que se detenga la construcción de nuevos grandes embalses en España por sus impactos

Para el mantenimiento de los recursos de agua es necesaria "la conservación de los ecosistemas fluviales", advierte la ONG


MADRID, 14 Mar. (EUROPA PRESS) -

Con motivo de la celebración hoy del Día Internacional contra los Grandes Embalses, la ONG Ecologistas en Acción solicitó que el Gobierno español paralice la construcción de los grandes pantanos y embalses en proceso y los que estén en trámite de comenzar con sus obras y que "no se vuelva a promover ninguno más".

Según informa la organización ecologista en un comunicado, en España "se continúa con la vieja política de construcción de estas grandes represas", como en los casos de los embalses de Yesa en Navarra, Biscaurrés en Huesca, o Breña II en Córdoba, además del de Melonares en Sevilla, Irueña en Salamanca o Castrovido en Burgos.

Así, criticaron que la creación de estos nuevos diques "es un claro ejemplo de una anacrónica política hidráulica basada en un insostenible crecimiento de la ofertas de los recursos, desatendiendo la eficiencia y control de las demandas y obviando los graves impactos sociales y ambientales de estas obras".

Así, explicaron, de seguir con estas acciones se provocará la desaparición de varios pueblos y ecosistemas "de alto valor económico, social, paisajístico y ambiental", que quedarán sepultados por el agua de los nuevos pantanos.

NO ES LA SOLUCION

Aunque se esgrime que la construcción de estos proyectos responde a una necesidad inevitable, Ecologistas en Acción se oponen a estos argumentos porque esta situación es en realidad la causa de una sequía "que se verá incrementada por los efectos del cambio climático", puesto que puede llevar a la pérdida de hasta el 25% de la capacidad de regulación del agua.

De este modo, la creación de nuevos embalses, afirman, "no soluciona el problema de la escasez en tanto que no se afronte su causa principal, que es el crecimiento continuo y descontrolado de la demanda", añadió la organización en el comunicado.

Igualmente se opusieron al argumento que habla de la necesidad de desarrollo, ya que lo que se está produciendo "es un problema de eficiencia del sistema", porque en la actualidad "sólo los consumos agrícolas suponen más del 80% del total".

En este sector se producen unas pérdidas de entre el 40% y el 60%, "llegándose a perder en las redes de riego un volumen similar al resto de consumos de la población española", explican. Sin embargo, a pesar de ser objeto de numerosas subvenciones, "no se produce una generación de empleo, ni un reparto de la riqueza en el mundo rural, ni al conjunto de los ciudadanos".

"En la actualidad todavía se continúa con la construcción de algunos grandes embalses, que producen un gran impacto medioambiental, social y económico, y cuya utilidad en muchos casos resulta prácticamente inexistente", denuncian.

El desarrollo de estos grandes proyectos "ha afectado al 20% de las zonas protegidas por su alto grado de biodiversidad" y "han supuesto la pérdida de ecosistemas de gran valor", como es el caso del pantano de Breña II, "que inundará una de las últimas zonas donde habita y se desarrolla el lince ibérico".

Por este motivo, la ONG considera que para poner en marcha un buen mantenimiento de la calidad y de la cantidad del agua, es necesaria "la conservación de los ecosistemas fluviales", puesto que el agua "es un bien necesario para la vida".

Finalmente, mostraron su solidaridad con los miembros de la organización Solidarios con Itoiz que fueron detenidos por oponerse la construcción del embalse de Itoiz en Navarra, que ha producido un gran impacto medioambiental y social, ya que inundó áreas de gran valor ecológico y varios pueblos.