La marca gallega no descarta la "inmediata finalización" de cualquier relación comercial, e incluso posteriores acciones judiciales
MADRID, 29 May. (EUROPA PRESS) -
Inditex, que ha puesto en marcha una auditoría específica sobre uno de sus proveedores en Portugal a raíz de un reportaje del semanario local 'Expresso' en el que se acusa a una empresa que trabaja para Zara de utilizar niños de entre 10 y 14 años para coser calzado de la marca gallega, aseguró este fin de semana en un comunicado que cree tener ya "identificado" a este proveedor y que no descarta la "inmediata finalización" de cualquier relación comercial con el proveedor, "sin perjuicio de posteriores acciones judiciales".
El sábado el semanario portugués denunciaba que los menores que trabajan en esta pequeña fábrica que provee de calzado a la firma Zara cobran apenas 40 céntimos de euro por cada par de zapatos cosidos a mano. El anuncio de investigación por parte de la marca no se ha hecho esperar, al calificar estos hechos, de ser ciertos, de "gravísimos". Según dijo, tomará medidas "con carácter inmediato".
'Expresso' lleva el reportaje a la portada de su suplemento 'Única', con el titular 'Carlitos, 11 años: 0,20 euros por zapato'. Según el semanario portugués, los pequeños trabajan cosiendo zapatos de la marca gallega, y lo hacen en sus casas, acompañados por toda su familia. Por cada par reciben 40 céntimos.
La empresa que supuestamente realiza estas prácticas está ubicada en la zona de Felgueiras, al norte de Portugal. Según la revista, esta práctica "es bastante habitual" en la zona norte del país vecino, especialmente entre Guimaraes y Celgueiras.
'Expresso' publica también la reacción de Inditex al conocer la noticia. "Vamos a confirmarlo primero, pero si es verdad Inditex será implacable y esa fábrica dejará de trabajar para nuestro grupo", afirma la empresa. El calzado cosido a mano en domicilios particulares sale de fábricas que lo transportan y distribuyen a través de intermediarios en la región de Vale Dovae.
José Guimaraes, dirigente del Sindicato del Calzado en Guimaraes, explica a 'Expresso' que las mismas furgonetas que distribuyen el material a las familias las recoge posteriormente y entrega "más zapatos para coser". "Las familias no tienen ninguna relación contractual con la empresa, que así se desresponsabiliza de ellas, se hace todo en la mayor de las ilegalidades", explicó Guimaraes.
NO DA EL NOMBRE DE LA FÁBRICA
Las fotografías que publica 'Expresso' han servido para identificar la fábrica que realiza estas prácticas, aunque Inditex no quiso revelar su nombre. El sistema de auditoría de la textil persigue cualquier supuesto contrario a su código de conducta, y entre ellos se encuentra la explotación infantil.
Zara investigó a la fábrica que aparece en el reportaje hace tan solo un año y no encontró ninguna irregularidad. Sólo en el último año, un total de 400 empresas externas de varios puntos del mundo dejaron de trabajar para Inditex por violar su código de conducta. Esas violaciones fueron relativas al trabajo infantil, a la libertad de asociación, a la salud, a la seguridad o al Medio Ambiente.
En su comunicado, Inditex, de acuerdo con la información disponible en este momento, asegura que "cree haber identificado a la compañía que presuntamente ha incurrido en estos graves incumplimientos", y cuyo contrato vigente incluye expresamente el compromiso de ésta en cuanto al cumplimiento del Código de Conducta, cuyo contenido íntegro forma parte del propio contrato.
Esta compañía "había sido auditada en el marco del proceso de auditoría de la cadena de suministro del Grupo Inditex en el último año con resultados favorables". En el caso de ser ciertos los incumplimientos del Código, "fueron expresamente ocultados al sistema de control de proveedores de Inditex", esgrime la compañía.
"Inditex mantiene desde hace muchos años una relación importante con el sector de fabricación de textil y calzado en Portugal, donde cuenta con una destacada base de proveedores de calidad contrastada y cumplimiento estricto de su Código de Conducta", concluye el comunicado.
