LONDRES, 27 Mar. (Reuters/EP) -
El sindicato Unite de tripulantes de cabina (TCP) de British Airways (BA), amenazó este sábado con la convocatoria de nuevas jornadas de huelga a menos que se produzcan avances en la negociación con la dirección de la empresa, precisamente cuando transcurre el segundo fin de semana consecutivo de paro al que están convocados 12.000 trabajadores.
"En este momento no vamos a anunciar ninguna acción de huelga y no tenemos que hacerlo hasta después del 8 de abril. Sigue siendo una posibilidad", explicó un portavoz de Unite, que representa aproximadamente al 90 por ciento de los TCP, en declaraciones a Reuters.
Finalmente, BA ha logrado que Gatwick y London City operen con normalidad este sábado y en Heathrow se han presentado en sus puestos suficientes trabajadores como para cubrir el 70 por ciento de sus vuelos de larga distancia. "Hemos podido minimizar el impacto, pero por desgracia, teniendo en cuenta que es una época de mucha actividad, no hemos podido dar alternativas a todos nuestros clientes", explicó el consejero delegado de BA, Willie Walsh, en un vídeo colgado en la página web de la compañía.
Unite, por su parte, asegura que el seguimiento de la huelga ha sido alto y que 43 vuelos han sido cancelados sólo en Heathrow. Los pasajeros de seis vuelos tuvieron que abandonar su avión después del embarque debido a la falta de personal.
Durante los tres primeros días de huelga, del 20 al 22 de marzo, BA se vio obligada a cancelar 1.100 vuelos de los 1.950 programados en las tres jornadas de paros, lo que supone el 56% de los vuelos y a elaborar un plan de vuelos especial para garantizar el transporte del 65% de los pasajeros durante la duración de la huelga.
También están convocados a huelga deste este sábado y hasta el próximo martes --del 27 hasta el 30 de marzo-- con la intención de forzar a la dirección de la aerolínea a modificar el plan de ajuste prevé la congelación salarial,recortes de personal en las rutas de larga distancia, la baja voluntaria a más de 1.000 empleados TCP y la reducción a la mitad de la jornada para 3.000 trabajadores.
Mientras, desde el Gobierno, se hace un llamamiento a la reanudación de las negociaciones. "Es muy dañina para British Airways, es muy dañina para la economía nacional y es muy dañina para los puestos de trabajo de los trabajadores que debe proteger el sindicato", afirmó el ministro de Transportes, Andrew Adonis, en declaraciones a Sky News.
"Por eso es tan importante que vuelvan a la mesa de negociación e intenten resolver esta disputa mediante el diálogo y no con la confrontación", dijo.
Ambas partes han manifestado su voluntad de negociar, pero no se ha fijado ninguna fecha concreta y continúa el cruce de declaraciones y reproches sobre las consecuencias de la huelga.
Mientras, BA anunció que alquilará durante cada día de huelga hasta 11 aviones con piloto y tripulación de seis aerolíneas diferentes, tanto británicas como europeas, para dar apoyo a su flota.
La compañía habría ampliado también los horarios de sus vuelos durante el nuevo periodo de huelga, gracias al aumento del número de tripulantes de cabina que no secundarán los paros y trabajarán con normalidad.
