MIRANDA DE EBRO (BURGOS), 26 Jun. (EUROPA PRESS) -
El vicepresidente de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), Jesús María Terciado, defendió este viernes, en su visita a la central nuclear de Santa María de Garoña (Burgos), el funcionamiento "modélico" de la nuclear y advirtió de que su cierre tendrá un impacto "muy negativo" en la competitividad y el empleo.
Terciado, expresó además su temor a que el cierre de Garoña "por una decisión política" podría sentar un "mal precedente" para el futuro empresarial, porque, a su juicio, "podrían seguirle nuevas empresas".
A través de la lectura de un comunicado, el también presidente de Cecale apoyó el informe favorable del Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) para la renovación de la licencia de explotación de la central burgalesa por diez años más, argumentando que "no se puede prescindir" de ninguna de las fuentes energéticas disponibles, incluida la energía nuclear que, subrayó, ofrece "calidad, garantía de suministro, precios competitivos y reducción de emisiones de gases de efecto invernadero".
Así, la Confederación Empresarial recordó "la importante colaboración de la energía nuclear, frente a otras tecnologías de base, en la lucha contra el cambio climático, al no generar prácticamente emisiones de dióxido de carbono por año" y concluyó mencionando "su contribución a la garantía y estabilidad en el suministro eléctrico".
Por su parte, el Presidente de FAE Burgos, Roberto Alonso, subrayó que es "básico" que siga funcionando Garoña para la comarca de Las Merindades, porque son muchas familias las que saldrían perjudicadas. En este sentido, destacó que Miranda, "que está siendo fuertemente castigada por la crisis", no puede sufrir el cierre de una planta por una decisión "partidista", que quiere responder a una promesa electoral que debería estar supeditada al interés general de la población.
Además, Miguel Lazpiur, presidente de Confebask, Confederación Empresarial Vasca, quiso expresar "un mensaje claro" de apoyo a una central "completamente necesaria" cuyo cierre se convertiría "en un lujo" cuando se está "tan necesitados, hoy en día, de energía" mientras que afirmó que no se puede prescindir de la energía nuclear "dentro del mix energético" a construir.
El presidente de la Confederación Vallisoletana de Empresarios, Manuel Soler, también participó en este acto de apoyo a la central nuclear convocado por Cecale. "Desde CVE afirmamos que como la energía nuclear es limpia, segura y barata, en España deberíamos plantearnos la construcción de nuevas centrales para evitar la dependencia energética del exterior, ya que importamos el 85 por ciento de la energía que consumimos", señaló Soler, acompañado por su homólogo palentino, Antonio Primo, o el presidente de la Confederación Castellano y Leonesa de la madera (Cemcal), José Antonio de Pedro Pascual.
Para el director general de Nuclenor, Martín Regaño, Santa María de Garoña está hoy en una situación "incomprensible, casi insólita", porque desde hace diez años se trabaja en la renovación y la preparación de informes, "y hoy, a ocho días de que finalice el permiso", la central se encuentra "en una situación de espera e incertidumbre", porque no saben si se "concederá la solicitud". Además, mostró su agradecimiento por "todos los apoyos empresariales, sindicales, sociales, de municipios, etc. y sobre todo, a los profesionales de Nuclenor, que encontrándose con esta incertidumbre, merecen que Industria resuelva favorablemente su futuro".
La cita, organizada por Cecale y la Confederación de Asociaciones Empresariales de Burgos (FAE), consiguió reunir, además, al presidente de la Sociedad de Empresarios Alaveses (SEA), Juan José Asurmendi; al secretario general de Empresa Familiar de Castilla y León, Eduardo Estévez Gudino, así como asociaciones empresariales de la zona de impacto de la central.
