Actualizado 05/10/2010 14:24

La inmigración frena la despoblación de las zonas rurales españolas, según un estudio

Paisaje
EP

MADRID, 5 Oct. (EUROPA PRESS) -

La llegada de inmigrantes a España ha conseguido frenar la despoblación de muchas zonas rurales del país, que en los últimos años y gracias al asentamiento de familias de origen extranjero han conseguido un crecimiento demográfico positivo, según un estudio del Real Instituto Elcano que define como "crucial" la influencia de los foráneos para los pueblos españoles.

El trabajo, elaborado por los profesores de Historia e Instituciones Económicas, Fernando Collantes y Javier Silvestre, junto al Catedrático de Historia Economía, Vicente Pinilla y el profesor titular de Economía aplicada, Luis Antonio Sáez, de la Universidad de Zaragoza, ha calculado la evolución demográfica de 22 provincias españolas del centro y noroeste peninsular que, en términos absolutos, perdieron población entre 1991 y 2008, y que suponen el 38,4 por ciento de la sociedad rural.

"Nuestros resultados muestran que la aportación de la inmigración ha frenado significativamente la pérdida de población para las 22 provincias estudiadas. Además, para una parte significativa de ellas la inmigración ha conseguido que su crecimiento demográfico fuera positivo desde el año 2000", concluyen los expertos.

Por ello, el informe señala que "el futuro demográfico de las zonas rurales más despobladas depende crucialmente de la inmigración", ya que en las 22 provincias en despoblación analizadas, los hijos de extranjeros supusieron entre 2000 y 2008 un 7,9 por ciento del total de nacimientos, cuando en el año 2000 fueron sólo un 3,4 por ciento y en 2008 eran ya un 12,5 por ciento del total de nacimientos.

En términos absolutos, el número de los inmigrantes residentes en estas zonas rurales ha crecido en casi 750.000 personas en el período 2000-2008 y, aunque las 22 provincias analizadas han recibido un número menor que la media de los pueblos españoles, el peso de los extranjeros ha pasado del 1,3 en 1991 y el 1,8 en el año 2000 a suponer un 5,5 por ciento del total de habitantes en el año 2008, "un incremento sustancial de su peso relativo".

MÁS EFICAZ SI LO GESTIONA UNA AGENCIA

Los expertos consideran que las políticas de las distintas localidades para activar su demografía han tenido una influencia determinante en esta evolución y apuestan por un "tratamiento integral" para dar respuesta tanto a la llegada de inmigración extranjera a la despoblación.

Asimismo, exponen que la repoblación es un proceso de largo plazo "que sólo puede considerarse culminado tras años de estancia de las familias", de forma que, aunque las fases de difusión y captación logren movilizar un importante flujo de nuevos residentes, "apenas resultan relevantes en sí mismas si no culminan con su permanencia al cabo del tiempo", lo que depende, fundamentalmente, del bienestar en el nuevo territorio.

Por ello, recomiendan que sea una agencia autónoma de los poderes institucionales "inspirada por criterios profesionales". "Eso permite una resolución más eficiente de los posibles conflictos, generar economías de escala en la prestación de servicios y transferir las experiencias exitosas de una manera más ágil entre los diferentes espacios en que actúa", señalan.