Actualizado 01/03/2011 21:11

Sáhara.- El ministro de Cooperación saharaui denuncia que la crisis ha reducido la ayuda internacional un 20 por ciento

TINDUF, 1 Mar. (Del enviado especial de EUROPA PRESS, Daniel Herrero) -

El ministro de Cooperación de la autoproclamada República Árabe Saharaui Democrática (RASD), Salek Baba Hossana, ha lamentado este martes los "efectos negativos" que la crisis financiera internacional ha tenido para el Sáhara Occidental, que ha visto como la ayuda humanitaria recibida se ha reducido entre un 20 y un 30 por ciento debido a la situación económica global.

Baba Hassana ha recordado que los campamentos de refugiados saharauis, donde viven alrededor de 160.000 personas, dependen "casi exclusivamente" de la ayuda internacional y ha denunciado que se hayan reducido los compromisos de otros gobiernos y agencias.

En declaraciones a Europa Press durante los actos del XXXV aniversario de la proclamación de la República Árabe Saharaui Democrática (RASD), que este martes se han trasladado a la wilaya de Smara, el ministro ha indicado que los efectos de la crisis global se han notado principalmente el año pasado y podrían extenderse durante 2011.

En este sentido, ha apuntado que, en 2010, de las tres caravanas solidarias planificadas sólo se celebraron dos, mientras que el programa Vacaciones en Paz, que cada año permite que miles de niños saharauis pasen parte del verano en España, no pudo alcanzar a todos los solicitantes. De los 9.000 menores que iban a beneficiarse de este plan, finalmente pudieron ir a España 7.000.

Baba Hassana ha dado una doble explicación a esta reducción de la ayuda. Por una parte, los países han contribuido con menos donaciones a las agencias de Naciones Unidas que colaboran con los saharauis. A ello se suma un descenso de las contribuciones llegadas desde España, no tanto por la colaboración de la Agencia Española de Cooperación Internacional -cuya ayuda anual se ha mantenido en los nueve millones de euros-- como por los recortes emprendidos por ayuntamientos, autoridades locales o la propia sociedad civil.

El ministro de Cooperación ha apuntado que uno de los objetivos de Marruecos es "cortarle el oxígeno" a los campamentos de refugiados saharauis buscando una reducción de la ayuda humanitaria. Sin embargo, según ha advertido Baba Hassana, es precisamente esta cooperación internacional la que impide una "radicalización" del conflicto territorial.

En este sentido, ha recordado que las demandas territoriales de la población saharaui deben resolverse cuanto antes y ha llamado a superar esta situación actual "ni de paz ni de guerra" con Marruecos.