MADRID, 7 Oct. (EUROPA PRESS) -
Más de 500 personas de Ferrer se han sumado este año a la segunda edición de los 'Days for Good', las jornadas de voluntariado corporativo promovidas por la compañía con el objetivo de involucrar a todas las personas en el propósito de generar un impacto positivo en la sociedad.
Entre los días 5 y 6 de octubre, las personas de Ferrer pueden participar en 48 acciones organizadas en España, Portugal, Austria, México, Costa Rica, Perú, Chile y Estados Unidos.
Todas las actividades están orientadas a impulsar la igualdad de oportunidades a través de la empleabilidad, el acceso a la salud, la alimentación y la educación, ya que Ferrer ha centrado la segunda edición de los 'Days for Good' en su pilar estratégico Social Justice. A través de él, la compañía quiere contribuir a una sociedad más justa y equitativa, apoyando a personas y colectivos en situaciones de vulnerabilidad.
Desde huertos y comedores sociales, hasta la construcción de aulas
Las actividades organizadas por Ferrer en el marco de los 'Days for Good' de este año incluyen acciones directas en diferentes ámbitos en nueve países. En el área de empleabilidad, la compañía ha organizado visitas a sus instalaciones y programas de formación de la mano de la Fundació xit en España. Asimismo, ha organizado colaboraciones con entidades para la reinserción laboral de personas en situación de vulnerabilidad en Costa Rica y Austria, y la construcción de un aula para el telebachillerato comunitario en México.
Entre las acciones dedicadas a la alimentación, destacan las recogidas de cosechas en los espacios de horticultura de la Fundación Ferrer Sustainability en Barcelona y Sant Pol de Mar (Barcelona) y la preparación de menús para comedores sociales, así como la distribución de alimentos a personas sin hogar en Portugal.
En el ámbito de la salud, Ferrer ha organizado en México actividades de apoyo a niños con enfermedades crónicas o avanzadas. A nivel educativo, Ferrer se ha implicado en la reforma del Collegi de la Santíssima Trinitat y la Escola Bon Pastor en Barcelona, la rehabilitación del espacio residencial de una fundación dedicada a atender niños en situación de vulnerabilidad en Chile y el desarrollo educativo de jóvenes estadounidenses en carreras STEM.
