Eduard Estivill dice que el "éxito" de sus libros radica en que "explica con palabras fáciles lo que la ciencia enseña"

Eduard Estivill
P&J
Actualizado: miércoles, 17 octubre 2012 20:01

Presenta en Sevilla 'Que no te quiten el sueño', un libro que trata en profundidad el origen de los trastornos del sueño en los adultos


SEVILLA, 17 Oct. (EUROPA PRESS) -

El doctor Eduard Estivill presenta este miércoles en Sevilla 'Que no te quiten el sueño' (Planeta), un libro en el que trata en profundidad el origen de los muchos trastornos del sueño que padecen los adultos. Con un estilo directo, múltiples ejemplos y consejos prácticos escritos con un lenguaje claro y sencillo, el autor disecciona todos los secretos del insomnio, porque "no he inventado nada, no propongo ninguna teoría, sino que simplemente me dedico a explicar con palabras fáciles lo que la ciencia nos ha enseñado, de ahí el gran éxito".

El también autor de 'Duérmete, niño' ha señalado en una entrevista a Europa Press que las causas del mal dormir "son más de 40 distintas" y afirma que "hay algunas muy conocidas como la gente que toma muchos estimulantes o los que tienen que dormir de noche". Pero, añade, "la causa más frecuenta de todas es aquella que afecta a personas normales sin problemas psicológicos ni médicos, y es simplemente el ritmo de vida que llevamos estos días", sobre todo "el cúmulo de tensión, de preocupaciones o el uso de nuevas tecnologías".

En este sentido, explica que a tenor de los últimos estudios realizados, el cerebro, para poder dormir, "necesita al menos dos horas de desconexión, es decir, que hemos de preparar el sueño porque no viene de golpe", y para ello, añade, "se dan una serie de recomendaciones en este libro". "Todos los libros que hacemos intentamos que siempre se basen en descubrimientos nuevos de lo que es la medicina del sueño, y ahora ha habido muchos avances en este capítulo de lo que es la desconexión del cerebro", añade.

Así, Estivill explica que cuando se está en estado de vigilia "lo que funciona es la parte más externa del cerebro, lo que llamamos la corteza cerebral, y en cambio, el sueño se produce en las estructuras más profundas". "El sueño es como un globo deshinchado cuando nos levantamos, pero a lo largo del día se va inflando, y después de estar entre 16 y 18 horas despierto, es cuando este globo aprieta a nuestra corteza cerebral y deja paso al sueño".

Pues, continúa, "este proceso no se produce de golpe, y pensábamos que podíamos estar conectados al móvil, a las redes sociales, repasando temas o solventando problemas en la familia, ir a la cama y que el sueño apareciera de golpe, y esto es imposible". "El sueño se tiene que prepara dos o tres horas antes para que la corteza vaya desconectando poquito a poco y deje paso al sueño", añade.

Para conseguirlo, Estivill da unas pautas "de mucho sentido común, pero que se necesita la voluntad para cumplirlas". Porque, añade, "los adultos tenemos un problema, y es que podemos entender muy bien lo que podemos hacer, pero somos muy poco rigurosos con nosotros mismos".

Entre sus consejos, Eduard Estivill apuesta por "desconectar dos o tres horas antes de acostarnos de todo lo que nos pueda aumentar el estado de alerta, como apagar el móvil, desconectarnos de las redes sociales, no hacer nada relacionado con el trabajo, una cena adecuadas, y una hacer una actividad que no tenga nada que ver con nuestro trabajo". "Por ejemplo, un periodista no pueda escuchar la radio o leer un artículo porque esto activa más su cerebro, ya que forma parte de su trabajo; un periodista lo que tiene que hacer es coleccionar sellos o mariposas".

Además, en España "somos distintos en algo" al resto del mundo, y es que "somos un país que dormimos menos que el resto de los europeos". Según los estudios que se tiene hoy en día, los españoles "dormimos un promedio de 40 ó 45 minutos menos cada día con respecto a Europa, y esto es básicamente por nuestra organización laboral en cuanto a horario, ya que terminamos muy tarde de trabajar, y, en cambio, nos levantamos a la misma hora que lo hacen los europeos", con lo que "no hay tiempo para desconectar, ni hacer una cena correcta o estar un rato tranquilos con la pareja".

"Somos un país corto de sueño", subraya Estivill, quien asegura que los medios de comunicación "hacen una labor muy interesante en este tipo de tema". "Soy optimista porque creo que con un poco de paciencia y explicándolo muy bien, conseguiremos que mucha gente duerma mejor y sobre todo que no tome tantas pastillas para dormir que son mucha veces inútiles", concluye.