CAMARGO, 26 Mar. (EUROPA PRESS) -
La Asociación RIA de Camargo procederá este domingo, 27 de marzo, al encendido de una carbonera tradicional, a partir de las doce del mediodía en el recinto de los huertos ecológicos de Revilla.
Según explica la asociación, el carboneo es un oficio prácticamente extinguido en la actualidad que RIA recupera para aplicarlo a la gestión de residuos vegetales derivados de las labores de control de plantas leñosas invasoras.
Concretamente, lo aplicará a la chilca, un arbusto introducido desde Norteamérica que causa graves perjuicios a la ecología de las marismas del Cantábrico.
Con la recuperación de este oficio, la asociación pretende convertir un residuo en un producto con valor añadido. Según destaca, esta iniciativa podría suponer un abaratamiento de los proyectos de restauración ambiental y el surgimiento de un nuevo yacimiento de empleo.
Además, la carbonera se podrá visitar durante el proceso de cocción, de lunes a viernes, con el fin de dar a conocer esta práctica que, vinculada la actividad de las Fábricas de Cañones y Artillería de Liérganes y La Cavada y a los Reales Astilleros de Guarnizo, fue responsable de la mayor deforestación sufrida por los bosques cántabros.
Por las mañanas, la carbonera estará abierta a grupos de alumnos de los centros educativos del Valle de Camargo. Las visitas están organizadas en colaboración con la Escuela Municipal de Medio Ambiente del Ayuntamiento dentro del proyecto de educación ambiental "Leña a la carbonera".
Mientras, por las tardes, de 15 a 20 horas, la carbonera quedará abierta a las visitas de todos los interesados.
En el encendido de la carbonera del domingo se presentará además la "Guía de participación ciudadana para la restauración ambiental y gestión sostenible de la Marisma de Micedo", editada dentro del proyecto europeo SUD'EAU, desarrollado por RIA en 2010 y financiado por la Consejería de Medio Ambiente y fondos FEDER.
En ella se recopila información sobre la historia de la marisma, el diagnóstico de problemáticas realizado por los ciudadanos en los últimos meses y los siguientes pasos a dar en el proceso de restauración y gestión del proyecto, que cuenta con el apoyo del Centro de Investigación del Medio Ambiente (CIMA) del Gobierno de Cantabria.
