Denuncian la muerte de un joven saharaui por disparos de las fuerzas marroquíes

MADRID, 25 Sep. (EUROPA PRESS) -

Un joven saharaui de 20 años de edad ha fallecido por disparos de las fuerzas de seguridad marroquíes durante un enfrentamiento en la ciudad de Assa Zag, en el sur de Marruecos, según han informado fuentes próximas al Frente Polisario.

Según la agencia saharaui de noticias SPS, el joven Rachid Chine falleció el lunes durante los enfrentamientos que estallaron tras el desmantelamiento por parte de las fuerzas marroquíes, el domingo por la noche, de un campamento en la región de Tizmi.

El Ministerio saharaui de Territorios Ocupados, citado por SPS, ha precisado que el joven, estudiante de instituto, murió a causa de un disparo en la espalda. Los enfrentamientos "han acusado decenas de heridos entre los saharauis, que no han podido dirigirse al hospital a causa del cerco de seguridad impuesto en la ciudad", ha agregado la misma fuente.

Por su parte, la Coordinadora Estatal de Asociaciones Solidarias con el Sáhara (CEAS-Sáhara), con sede en Madrid, ha denunciado este "nuevo crimen perpetrado por el Ejército marroquí contra la indefensa población saharaui por intentar ejercer sus derechos de expresión y manifestación".

Asimismo, CEAS-Sáhara ha asegurado este miércoles, citando a "defensores saharauis de Derechos Humanos en los territorios ocupados del Sáhara Occidental", que la ciudad de Assa "está sitiada y se han producido violentos enfrentamientos entre el Ejército y la población, con una treintena de heridos hasta el momento".

"Esta nueva víctima de la represión marroquí contra la población saharaui se une a una larga lista de detenciones arbitrarias, torturas, encarcelamientos, desapariciones, y brutales ataques contra manifestaciones pacíficas", ha agregado la organización.

Asimismo, CEAS-Sáhara ha reclamado, "una vez más", la necesidad de que la Misión de Naciones Unidas para el Referéndum en el Sáhara Occidental (MINURSO) "tenga entre sus cometidos la vigilancia del ejercicio de los Derechos Humanos", una cuestión que "cuenta con la oposición frontal de Marruecos" y a la que se opusieron Francia, España y Rusia durante el último debate para la renovación del mandato, a pesar de la intención de Estados Unidos de incluirla.

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