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MADRID, 8 Abr. (EUROPA PRESS)
Coincidiendo con el Día Internacional del Pueblo Gitano, Sara Giménez, mujer gitana, abogada y responsable del Área de Igualdad de Trato de la Fundación Secretariado Gitano, reflexiona en esta tribuna sobre los problemas que a día de hoy siguen teniendo las personas de etnia gitana.
En un día como hoy, 8 de abril, Día Internacional del Pueblo Gitano, pienso en el recorrido y la situación actual de la comunidad gitana. Echo la vista atrás y me afloran sentimientos diversos. Por un lado la alegría por sentirme y ser mujer gitana, por haber logrado una promoción educativa y profesional, y por ver cómo otros gitanos y gitanas también lo están consiguiendo.
Por otro lado me invade la tristeza, una tristeza profunda por la lamentable persecución que como pueblo hemos sufrido a lo largo de la historia y por las injusticias que aún hoy, en pleno siglo XXI, siguen padeciendo muchas de las personas gitanas que pertenecemos a esta minoría étnica, principalmente en algunos países Europeos.
Creo que la situación de la comunidad gitana en España ha mejorado, hemos sido un país modélico en cuanto a políticas de inclusión social de la comunidad gitana, y me preocupa que los actuales momentos de crisis económica estén provocando un retroceso en los logros que tanto ha costado conseguir; cuando hablamos de grupos vulnerables, retroceder cuesta muy poco y promocionar cuesta mucho.
Me alegra ver a las numerosas personas gitanas que hemos accedido al empleo por cuenta ajena; la valiente respuesta que las mujeres gitanas han mostrado en los procesos de promoción y autonomía personal -superando la barrera de la múltiple discriminación por su doble condición de mujeres y gitanas-; los jóvenes gitanos que acceden a estudios superiores, formaciones profesionales, etc.
Estos avances son los que normalmente no se ven en nuestra sociedad cuando hablamos de comunidad gitana, una gran parte de esta minoría somos invisibles, en cambio, abundan las noticias negativas, programas televisivos sesgados y morbosos, información que fomenta los prejuicios y estereotipos hacia todo el pueblo gitano.
En el Día Internacional del Pueblo Gitano quiero también detenerme en los grandes retos pendientes que tenemos para lograr la igualdad de oportunidades de la comunidad gitana.
Desde mi punto de vista, y por mi propia experiencia, es fundamental lograr la promoción educativa de los jóvenes gitanos; me alarma que todavía más del 60% del alumnado gitano no finalice la educación secundaria obligatoria.
Esta es la línea de trabajo que debemos impulsar desde las entidades que trabajamos por y para la promoción del pueblo gitano, pero también desde las administraciones competentes y desde la propia comunidad gitana.
Otro reto fundamental es acabar con el rechazo social y la discriminación que seguimos padeciendo. Un rechazo social que se traduce en España en graves problemas para acceder al empleo, a una vivienda, a educación, a bienes y servicios, etc.
En el día a día de mi trabajo como responsable del Área de Igualdad de Trato de la Fundación Secretariado Gitano conozco a diario casos en los que a una persona, por su pertenencia étnica, se le niega el alquiler de una vivienda, el acceso a una entrevista de trabajo, la entrada a un lugar de ocio, etc. ¡Es imposible acceder a una vida digna con esta barrera!
En Europa la situación es más grave, el antigitanismo está muy presente, actuaciones motivadas por el odio racial o étnico; ataques violentos, expulsiones masivas, desalojos forzosos, escolarizaciones segregadas, discursos de líderes políticos que estigmatizan y promueven el rechazo hacia este grupo de población.
Me parece increíble que estas acciones se sigan tolerando. En un día como hoy, quiero alzar la voz para pedir un STOP a todas las acciones que vulneran los derechos humanos del pueblo gitano, derechos reconocidos en la legislación estatal e internacional.
Europa debería actuar con contundencia ante acciones que atentan contra la dignidad, la integridad de las personas, la igualdad y el desarrollo de una vida digna. Hay que dejar de mirar para otro lado y ante realidades complejas buscar soluciones ajustadas a derecho.
La crisis que estamos viviendo en Europa no debe ser un pretexto para volver a estigmatizar y perseguir a la comunidad gitana, como lamentablemente se ha hecho en el pasado.
Como ciudadana europea y gitana, me preocupa el ascenso del apoyo a los partidos antigitanos en varios países europeos, lo cual supone una seria amenaza para la convivencia y el respeto a los derechos fundamentales.
Mi recorrido personal y profesional ha venido motivado por el apoyo a la defensa de los derechos de mi pueblo, que desarrollo a través de mi trabajo en la Fundación Secretariado Gitano.
Necesitamos sumar alianzas con otras entidades sociales, las administraciones competentes y la ciudadanía en general, para lograr una sociedad más igualitaria.
Sara Giménez Giménez.
Abogada. Área Igualdad. La Fundación Secretariado Gitano es una entidad social intercultural sin ánimo de lucro que presta servicios para el desarrollo de la comunidad gitana en España y en Europa.
