JARTUM, 3 Dic. (Reuters/EP) -
El Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) está reduciendo su presencia en la conflictiva región sudanesa de Darfur para proteger a su personal de una oleada de secuestros, informó hoy jueves el mismo Comité, que mantendrá a sus cooperantes extranjeros en las principales ciudades y evitará organizar viajes a áreas rurales subdesarrolladas.
"Solíamos concentrarnos en áreas remotas donde casi nadie más trabajaba. Trabajamos con granjeros y grupos de agricultores (...) pero realmente no podemos hacer nada más", dijo la portavoz del CICR, Tamara al Rifai.
En lo que va de año, un total de 14 extranjeros han sido secuestrados en Darfur y en Chad y República Centroafricana (RCA), justo al otro lado de la frontera. Dos de ellos eran miembros de Cruz Roja.
Estos incidentes han despertado el temor de las agencias humanitarias que operan en los tres países, en los que grupos de hombres armados se mueven y cruzan las fronteras con total libertad. "La gente que necesita ayuda es la que está pagando el precio de esos secuestros", condenó Al Rifai. A pesar de su repliegue, la agencia seguirá financiando los trabajos de emergencias en los hospitales y otros centros sanitarios.
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