Dos adolescentes británicos, absueltos de planear una matanza similar a la de Columbine

LONDRES, 16 Sep. (EUROPA PRESS) -

Dos adolescentes británicos han sido hallados no culpables de planear un ataque contra su escuela inspirándose en la masacre del instituto estadounidese Columbine, y han sido absueltos de los cargos de conspirar para asesinar y provocar explosiones.

Matthew Swift, de 18 años, y Ross McKnight, de 16, fueron acusados de intentar atacar la escuela Audenshaw el pasado 20 de abril. Los dos mantuvieron siempre que el complot era una "fantasía". El abogado de McKnight señaló que la acusación era "demasiado dura" y un desperdicio de los fondos públicos.

Al jurado de un tribunal de Manchester le llevó 45 minutos absolverles de los cargos de conspiración para asesinar y provocar explosiones, informa la BBC. Presuntamente, los dos se habían obsesionado con los asesinos de Columbine, Eric Harris y Dylan Klebold, que mataron a doce estudiantes y a un profesor antes de suicidarse el 20 de abril de 1999.

Después de su absolución, Ross McKnight leyó un comunicado en el que manifestaba que esperaba que el caso no hubiera afectado a sus posibilidades de ingresar en el Ejército. "Me gustaría dejar claro que en ningún momento nadie puso en peligro a ninguna persona de la escuela secundaria Audenshaw ni en el centro comercial Crown Point North", afirmó. "Fue sólo una fantasía, no una realidad", añadió.

Por su parte, Matthew Swift agradeció a sus amigos y a su equipo legal por haber "creído en él". "Me gustaría dejar esto detrás", añadió.

La Fiscalía basó gran parte del caso en los diarios que ambos guardaban, que estaban llenos de manifestaciones en contra de la sociedad, además de detalles de un plan denominado "Proyecto Arcoiris", junto con mapas de la escuela.

Tanto Harris como Klebold tenían documentos similares antes de que cometieran la matanza en 1999, pero los abogados de la defensa declararon ante el jurado que los diarios eran los garabatos de unos adolescentes con una "imaginación hiperactiva". Los acusados, al subir al estrado, declararon al jurado que sus pensamientos y escritos nunca fueron más allá de los reinos de "la fantasía".

El jurado incluso sonrió cuando el padre de McKnight, Ray, un oficial de Policía, aseguró que su hijo estaba lleno de ideas "descabelladas". "Nunca lo dudé, ahora estamos increíblemente aliviados", añadió poco después de la absolución de su hijo.

Ray McKnight también indicó que ninguno de los dos adolescentes llevaron bien los seis meses de prisión preventiva. "Ha sido como el purgatorio, una agonía absoluta. Ninguno de los dos tuvo problemas con la Policía con anterioridad y ahora han estado encarcelados los seis últimos meses", afirmó.