MADRID 9 Oct. (EUROPA PRESS) -
Amnistía Internacional pide al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, que inste a su homólogo estadounidense, Barack Obama, a apoyar la próxima resolución "por una moratoria internacional" de la pena de muerte, en el marco de Naciones Unidas.
Con motivo de la reunión que ambos presidentes mantendrán el próximo día 13 de octubre, esta organización realiza esta petición en el marco de la celebración del Día Mundial contra la Pena de Muerte que se conmemorará el sábado.
Amnistía recordó que el Gobierno español anunció en junio de 2008 una iniciativa contra la pena de muerte cuyo objetivo es lograr una suspensión de las ejecuciones en todo el mundo en 2015, y que en septiembre de 2008, Zapatero lanzó esta iniciativa a nivel mundial durante su discurso ante la Asamblea General de las Naciones Unidas.
Durante el periodo en que España asuma la Presidencia de la Unión Europea será "fundamental" el impulso del Gobierno español para que en el otoño de 2010 la Asamblea General de las Naciones Unidas logre recoger los apoyos "necesarios" para aprobar una nueva resolución contra la pena de muerte, "que permita seguir avanzando hacia un mundo libre de ejecuciones".
Al respecto, Amnistía Internacional lanza una campaña con motivo del Día Mundial Contra la Pena de Muerte para sumar firmas que logren el fin de las ejecuciones a menores como paso hacia la abolición total de la pena capital.
Las firmas se entregarán, junto a las recogidas por la Coalición Mundial contra la Pena de Muerte, el próximo 20 de noviembre, Día Internacional de los Derechos de la Infancia y vigésimo aniversario de la Convención de los Derechos del Niño, que Arabia Saudí, Irán, Yemen y Sudán están "obligados a respetar", ya que "siguen imponiendo la pena capital y ejecutando a personas que eran menores en el momento de cometer los delitos".
Por esta razón, esta entidad se dirige a las autoridades de estos cuatro países para que pongan fin a esta práctica "inhumana, cruel y degradante".
En un nuevo informe titulado 'Pena de muerte: ¿una pena en vías de extinción?' que Amnistía Internacional publica hoy, se pone de relieve como "la mayor parte del mundo está avanzando hacia la abolición con paso lento pero firme".*
El año 2008 acabó con una nueva resolución de la Asamblea General de las Naciones Unidas en la que se pide una moratoria de las ejecuciones, como primer paso hacia la suspensión total. Fue aprobada con 106 votos a favor, 46 en contra y 34 abstenciones, "un resultado que supone un importante avance con respecto a otra resolución similar de 2007".
Burundi y Togo se han unido durante 2009 a la lista de países abolicionistas por ley para todos los delitos, que suma ya 94 naciones, a las que se añaden 10 que han suprimido la pena de muerte para delitos comunes, y 35 que son consideradas abolicionistas en la práctica. En total, 139 abolicionistas por 58 que mantienen la pena, aunque muchos hace años que no recurren a ella. También el estado de Nuevo México en EEUU ha abolido la pena capital en este año.
LA POBREZA EN EL CORREDOR DE LA MUERTE
En este nuevo informe de la organización se aborda también la manera "discriminatoria" en que se aplica a menudo la pena de muerte, imponiendo un número "desproporcionado" de condenas "a personas pobres y a miembros de minorías y comunidades raciales, étnicas y religiosas en diversos países del mundo".
Ya sea en Nigeria, Estados Unidos, Irán o Arabia Saudí, la capacidad para pagarse una buena defensa, para tener acceso a sectores influyentes de la sociedad, o incluso para retribuir a los familiares de las víctimas para que accedan al indulto, se convierte en la "clave" para poder eludir el patíbulo. "Tanto es así, que en muchos casos el estatus socioeconómico del acusado determina las posibilidades de ser ejecutado o no, aseguró.
En varios países islámicos, a la cuestión de la defensa se suma la de la legislación que permite conseguir el indulto si la familia de la víctima acepta a cambio una indemnización económica que debe pagar la familia del acusado y que suele ser "muy elevada". Por el contrario, si la baja calidad de la defensa de oficio es un factor agravante en muchos países, en otros, los más pobres, la defensa prácticamente no existe.
DATOS Y CIFRAS
En Arabia Saudí, al menos 102 personas fueron ejecutadas en 2008, y hasta el 17 de septiembre de este año se ha tenido noticia de la ejecución de otras 55 personas, de las cuales 15 eran ciudadanos extranjeros residentes en este país.
En Estados Unidos, el número de ejecuciones ha mostrado una tendencia "a disminuir" desde que alcanzó sus cotas "más altas" a mediados de los 90. En 2008 se registraron 37 ejecuciones, pero en 2009 ya van 39, a falta de 15 ejecuciones que están programadas para lo que queda de año.
Finalmente, en Pakistán pese a un "alentador descenso" en el número de condenas a muerte y ejecuciones, se calcula que en 2008 fueron condenadas a muerte 236 personas y que al menos 36 fueron ejecutadas, y unos 7.500 reos siguen en espera de la ejecución.