CASTELLÓN, 27 Mar. (EUROPA PRESS) -
La Junta de Gobierno Local y el alcalde de Burriana (Castellón), Alfonso Ferrada, condenaron hoy la muerte de una vecina de la localidad de 36 años supuestamente a manos de su marido, de 45 años, el cual posteriormente intentó quitase la vida con un arma blanca, al considerarla "un atentado contra los derechos humanos y la dignidad de las personas, que impide a nuestra sociedad continuar avanzando por la senda del bienestar y del progreso social que deseamos", según informaron en un comunicado fuentes municipales.
Al mismo tiempo, reiteraron su compromiso en la lucha contra todo tipo de violencia "denunciando las agresiones, apoyando a las víctimas, no permaneciendo en silencio ante la violencia y trasmitiendo a las generaciones futuras el respeto a la igualdad de mujeres y hombres".
El Ayuntamiento ha fijado para mañana una jornada de luto oficial, que comenzará a las 00.00 horas, con motivo de este asesinato. A las 12.00 horas, la alcaldía ha convocado una concentración en la plaza Mayor, frente al Ayuntamiento de la ciudad, en la que el primer edil, Alfonso Ferrada, leerá en nombre de la Corporación Municipal un manifiesto institucional de condena de la violencia de género y, en particular, del crimen perpetrado hoy. La bandera de Burriana ondea a media asta y con crespón negro desde este mediodía en señal de luto por esta nueva víctima de la violencia de género contra las mujeres, según dichas fuentes.
La Guardia Civil tuvo conocimiento del crimen cuando pasadas las 9.00 horas de hoy se personó en el cuartel de la Benemérita del municipio la madre de la víctima para informar --con dificultad ya que no dominaba el castellano-- de que algo había sucedido en el domicilio de su hija, en la calle Finello número 36, cercano a las dependencias del Instituto Armado.
El presunto agresor tenía impuesta una orden de alejamiento que le impedía acercarse a la víctima desde el pasado 14 de febrero, después de que la mujer le denunciara por una amenaza y agresión de la que fue asistida en el centro de salud de la localidad, según informaron a Europa Press fuentes de la Guardia Civil. Tanto el presunto agresor como la fallecida son de nacionalidad rumana.
