El director global de sostenibilidad de P&G subraya que la compañía busca "reducir el impacto ambiental de sus productos"
AMIENS (FRANCIA), 18 (de la enviada especial de EUROPA PRESS, Laura Martínez)
Procter & Gamble (P&G) se ha fijado como objetivo incrementar el uso del transporte ferroviario en la cadena de distribución, que pasará del 10 por ciento actual al 30 por ciento en 2015, una medida que representará una reducción anual de 67.500 toneladas de C02, según explicó el responsable de Logística de la compañía, Didier Delmotte.
En el marco de la presentación del nuevo detergente 'Ariel Excel Gel' en la planta de Amiens (Francia), Delmonte explicó a los asistentes el desarrollo de dos proyectos --en Francia y Bélgica-- con los que la compañía prevé alcanzar este objetivo.
Los productos de P&G --comercializados bajo marcas como Pantene, Gillette, Oral B, Pringles, Ariel o Duracell-- viajan anualmente más de 200 millones de kilómetros a través de toda Europa. Al introducir variaciones en su red de distribución a gran escala, la compañía minimizará no sólo las emisiones de CO2 sino también "el número de accidentes y la siniestralidad en la carretera", según destacó Delmonte.
Por otro lado, la planta de P&G en Amiens alberga el mayor centro de distribución de Europa, con una extensión de 60.000 metros cuadrados y una capacidad para almacenar hasta 70.000 palets. El edificio ha sido diseñado bajo criterios de eficiencia energética ya que cuenta con paneles solares, paneles de azotea translúcidos para aumentar la luz natural y aislamiento termal, entre otras características.
ESTRATEGIAS SOSTENIBLES
Por su parte, el director global de sostenibilidad de P&G, Peter White, señaló que este tipo de iniciativas forman parte de la estrategia de sostenibilidad de la compañía, que busca "reducir el impacto ambiental de sus productos". Precisamente, en el último año, P&G destinó dos billones de dólares en las ventas de productos de innovación sostenibles.
White enumeró las principales líneas de sostenibilidad de la compañía basadas en la innovación de los productos, la cadena de distribución, el apoyo a los empleados a través de programas de voluntariado y políticas de conciliación, el respaldo a los 'stakeholders' y la responsabilidad social.
En este último punto, recordó que los diferentes programas que lleva a cabo la compañía --que colabora con entidades como Unicef o la Iniciativa Global de Clinton-- beneficiarán a cerca de 250 millones de niños en 2012, y permitirán la potabilización de dos billones de litros de agua en países en desarrollo, entre otras actuaciones.