MADRID, 19 Jun. (EUROPA PRESS) -
Entreculturas, junto al Servicio Jesuita a Refugiados, han lanzado la campaña '4 Palabras Para Abrir el Mundo', con motivo del Día Internacional de las Personas Refugiadas que se celebra el 20 de junio.
Según ha indicado la ONG, a finales de 2018, los Estados miembros de las Naciones Unidas adoptarán los Pactos Globales sobre Migración y Refugio, lo que constituye "una excelente oportunidad para que la educación de niñas, niños y jóvenes se ponga en primer término".
De este modo, la organización pide que se incluyan en estos pactos los 20 puntos de acción propuestos por el Papa Francisco que, según ha indicado, se resumen en los cuatro verbos de la campaña: acoger, proteger, promover e integrar. "Son 4 palabras que pueden abrir el mundo de millones de niños y niñas", ha destacado.
'Acoger', para garantizar vías seguras y evitar que sean retenidos o viajen solos; 'Proteger', para asegurar que acceden a una educación de calidad y cuentan con apoyo económico para vivir una vida digna; 'Promover', y hacer posible que se reúnan con sus familias, prevenir el abuso o la explotación y fomentar su desarrollo integral a través de la educación; e 'Integrar', para que puedan adquirir la nacionalidad del país de acogida rápidamente.
En una rueda de prensa para presentar la campaña, la responsable del Departamento de Estudios e Incidencia, Valeria Méndez de Vigo, ha destacado que "los niños, niñas y jóvenes menores de 18 años son el grupo de edad más afectado por el desplazamiento forzoso, ya que constituyen el 51% de la población refugiada del mundo".
Además, ha recalcado que la media de años que una persona refugiada o desplazada pasa en esa situación es de 17. "Muchas niñas y niños pasan todo su periodo educativo en situación de refugio, ya sea en un campo de refugiados o en asentamientos urbanos", ha subrayando.
Según ha informado Entreculturas, un 50% de niñas y niños refugiados asiste a la escuela primaria, frente al 91% del resto en el mundo; y el 23% de la adolescencia está escolarizada, frente 84% del resto de adolescentes en el mundo. Además, un 1% de jóvenes refugiados cursa estudios de educación postsecundaria, frente al 36% del resto de jóvenes en el mundo.
"De los 550.000 niños y niñas refugiados en Líbano el 60% no van a la escuela. La mayoría además han vivido experiencias traumáticas de manera que la escuela los abrazan y acoge para ayudar a reconstruir sus vidas", ha dicho Fadi Daou, director de los proyectos del SJR en Bourj Hammoud (Líbano).
LA EDUCACIÓN ES UN DERECHO
Además ha hecho hincapié en que "la educación es un derecho que no debería interrumpirse durante las crisis humanitarias, ni en situaciones de refugio y desplazamiento forzoso ya que promueve la dignidad humana". "Es una intervención que salva vidas", ha recalcado.
Hanna Khoury, refugiado sirio profesor de uno de los colegio del JRS en Líbano, ha comentado que "lo más importante para las personas refugiadas es sentirse amadas, una mano que se preocupe por ellos y les apoye y ojos para ver que también son seres humanos".
Con motivo de esta campaña sus 25 alumnos y alumnas han realizado dibujos que muestran su mundo ideal y que han entregado este martes a los niños y niñas del Colegio Divino Corazón de Madrid. A su vez, Hanna ha recogido dibujos que los niños de Madrid han hecho para sus alumnos sirios.
"Compartir la experiencia del intercambio de estos dibujos, el día de hoy así como otra multitud de actividades desarrolladas con Entreculturas como la gestión de la convivencia desde la no violencia, la red solidaria de jóvenes, las asambleas comunitarias, el encuentro global, no solo abren los ojos de estas aulas al mundo sino que traen el mundo a estas aulas", ha concluido Pablo Gil Corona, director pedagógico de Educación Secundaria del Colegio Divino Corazón.
