Actualizado 12/03/2009 16:15

Expertos alertan de la necesidad de reducir "mucho más drásticamente" las emsiones de CO2 para evitar una "catástrofe"


MADRID, 12 Mar. (EUROPA PRESS) -

Un grupo de expertos alerta de que será necesario recortar las emisiones de gases contaminantes de forma "mucho más drástica" de lo que se había previsto antes de 2050 para evitar una "alteración catastrófica" del clima, según concluyen en el libro 'El mundo ante el calentamiento global. La situación del mundo en 2009'.

Así, el texto advierte de la necesidad de reducir las emisiones y prepararse para la adaptación al cambio climático, porque la temperatura de la Tierra ha aumentado ya en más de 0,8 grados centígrados desde que a mediados del siglo XVIII se inició la Revolución Industrial y probablemente será "inevitable" un calentamiento de 1 grado centígrado más por las emisiones de GEI, cuyo potencial de captura de calor aún no ha repercutido en la temperatura superficial global.

"No queda mucho tiempo. Sellar un pacto para salvar el clima del planeta requerirá un apoyo popular generalizado y una voluntad política mundial para cambiar a las energías renovables, a nuevos estilos de vida y a una escala de actividad humana que respete los límites de la atmósfera", afirma el vicepresidente de proyectos de Worldwatch y codirector del proyecto 'La Situación del Mundo 2009'.

Asimismo, el climatólogo W.L.Hare concluye en otro capítulo del libro editado en castellano por CIP-Ecosocial e Icaria que, para evitar que el clima llegue a un punto de no retorno catastrófico será necesario reducir las emisiones a un 85 por ciento en 2050, para alcanzar niveles por debajo de los niveles de 1990 y disminuir "todavía más" posteriormente.

Según Hare un calentamiento de 2 grados centígrados supone "riesgos inadmisibles" para sistemas naturales y humanos vitales, que podrían conducir a la pérdida de especies, a una gran reducción de la capacidad de producción de alimentos de los países en desarrollo, a una grave escasez de agua para cientos de millones de personas y subidas importantes del nivel del mar, con la consiguiente inundación de las zonas costeras.

Ante este panorama, los autores sin embargo afirman que una estrategia climática exitosa conllevará reducciones rápidas de las emisiones e importantes inversiones en adaptación, financiados ambos objetivos principalmente por los habitantes y países más ricos del plantea. La estrategia requerirá abordar además la relación entre calentamiento global y la producción de alimentos, el crecimiento de la población y la economía global.

Finalmente, la obra señala el camino para que además de vencer al cambio climático, salga más estable, más justo y más próspero de la situación en que se encuentra. El libro incluye seis capítulos sobre tendencias generales y algunos de los elementos que deberían figurar en el acuerdo que deberán lograr los países para comenzar a estabilizar el clima.