Actualizado 05/08/2009 20:42

Lamata destaca la atención integral que presta la Fundación Madre de la Esperanza a los discapacitados intelectuales


TOLEDO, 5 Ago. (EUROPA PRESS) -

El consejero de Salud y Bienestar Social, Fernando Lamata, señaló hoy que la Fundación Madre de la Esperanza, con sede en Talavera de la Reina (Toledo) es un ejemplo de la atención integral que se presta en Castilla-La Mancha a las personas con discapacidad intelectual con el apoyo y el impulso del Gobierno regional.

Lamata, acompañado por el alcalde de Talavera de la Reina, José Francisco Rivas, el delegado provincial de Salud y Bienestar Social, Hugo Muñoz, y el delegado de la Junta de Talavera, José Luis González, mantuvo hoy un encuentro con la directora de la Fundación Madre de la Esperanza, Sor María Jesús Álvarez, y el delegado de esta institución, Daniel León, para conocer la actividad que desarrolla esta entidad y las actuaciones que desarrolla en colaboración con el Gobierno de Castilla-La Mancha.

Según el consejero, la Fundación dispone de distintos recursos con cerca de 300 plazas para atender a las personas con discapacidad intelectual en el ámbito de la atención temprana, de 0 a 6 años; la educación especial desde la etapa infantil hasta la formación profesional; la formación prelaboral a través de centros ocupacionales o especiales de empleo; la integración social con viviendas tuteladas y la atención permanente en la residencia para personas con discapacidad grave.

Este amplio conjunto de actuaciones tiene el apoyo del Gobierno de Castilla-La Mancha, tanto desde la Consejería de Salud y Bienestar Social, con una inversión para este año de 1,3 millones de euros, como desde las consejerías de Educación y Ciencia y de Trabajo y Empleo, informó la Junta en nota de prensa.

Además, el consejero reiteró en la reunión el compromiso del presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, de aumentar cada año un 15% la partida destinada a la atención de las personas con discapacidad. Este año superará los 122 millones de euros.

En ese sentido, Lamata recordó que en los dos últimos años el Gobierno de Castilla-La Mancha ha abierto cuatro residencias para personas con discapacidad grave, pasando de 16 a 20 centros de estas características en la región, uno de ellos gestionado por Madre de la Esperanza.

Por su parte, la directora de la Fundación señaló que esta entidad tiene como misión mejorar la calidad de vida de las personas con discapacidad intelectual y de sus familias, desde una visión católica, como ciudadanos miembros de la comunidad y con el compromiso y participación de los profesionales.