CANBERRA, 17 Ene. (EUROPA PRESS) -
Los gobiernos de Australia y Afganistán han firmado este lunes un acuerdo que permite a las autoridades del país insular obligar a volver al país centroasiático a los afganos que hayan solicitado asilo y no lo hayan conseguido.
El ministro de Inmigración australiano, Chris Bowen, ha asegurado que esto disuadirá a los afganos que se estén planteando viajar a Australia. "Para disuadir a la gente de arriesgar su vida uniéndose a aventuras de tráfico de personas, es importante que los afganos que no consigan protección en Australia sean devueltos a Afganistán", ha señalado.
Desde 2008 han llegado por mar a Australia unos 4.300 afganos, y en los centros de detención del país hay actualmente 2.700, según Bowen, citado por el diario 'The Sydney Morning Herald'.
"Nunca, durante los años (de gobierno) de (el primer ministro John) Howard (1996-2007), nunca hasta ahora se han realizado retornos forzados de Australia a Afganistán", ha aclarado Bowen después de firmar en Sidney el memorando de entendimiento con el ministro de Refugiados afgano, Jamaher Anwary, y el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados.
Pero la oposición se ha mostrado escéptica con el acuerdo porque duda que el Gobierno lo vaya a aplicar. "El ministro es incapaz de decir cuando se va a expulsar a nadie", ha manifestado el portavoz de la oposición sobre asuntos de inmigración, Scott Morrison. "No creo que el Gobierno tenga la determinación de aplicarlo", ha añadido.
En los tres últimos años, las autoridades australianas solo han devuelto a Afganistán a tres solicitantes de asilo, todos ellos en 2010 y por voluntad propia. En 2008 y 2009, devolvieron a un total de 126 personas a sus países de origen.
Para el Consejo de Refugiados de Australia, el acuerdo firmado por Kabul y Canberra no incluye suficientes salvaguardas para los solicitantes de asilo expulsados. "En Afganistán, la gente está amenazada no tanto por acciones del Gobierno como por acciones de personas a las que el Gobierno no puede o no quiere controlar", ha advertido su director ejecutivo, Paul Power.
El Ejecutivo australiano se ha comprometido a destinar dinero a ayudar a Afganistán a mejorar su sistema de pasaportes y al alojamiento de los solicitantes de asilo que vuelven a su país. La ONU, por su parte, supervisará la forma en que se aplica el acuerdo.