MADRID, 27 Oct. (EUROPA PRESS) -
El párroco de San José Obrero, el sacerdote Diego Morente, "nunca había sospechado hasta ahora" que los novios que acudían a contraer matrimonio a su parroquia fueran con otro motivo que el amor, tras conocerse hoy que la Policía Nacional ha desactivado una red internacional que concertó más de un centenar de matrimonios de conveniencia. "Entre seis y siete" se habrían celebrado en su iglesia.
En declaraciones a Europa Press TV, Morente reconoció estar "perplejo y sorprendido" por esta operación policial, que relaciona a once iglesias madrileñas con la denominada 'Operación Escarlata', ya que siempre había obrado "con buena fe" pensando que la pareja que visitaba su centro eclesiástico lo hacía "con buenas intenciones" y aclaró que "nunca había sospechado" de ninguna de ellas.
Desde que la Policía verificó que varios expedientes prematrimoniales que utilizaban el nombre de la parroquia de San José Obrero no estaban firmados por Morente, el sacerdote subrayó que tiene "más cuidado" y procura "indagar" para cerciorarse de que el futuro matrimonio "tenga razón de ser".
En este sentido, apuntó que si a partir de ahora surge "alguna duda sería un impedimento" para oficiarlo. Así, explicó que los motivos por los que se impiden los matrimonios son, por ejemplo, que la pareja "no impedirá la procreación, que no existe presión social o cuestionamiento alguno, si no que lo hacen con naturalidad, sencillez y libertad". "Si ahora hay algún indicio, cuestionaremos seriamente si proceden con buena ley", advirtió.