MADRID, 13 Jun. (EUROPA PRESS) -
El Banco de España impuso sanciones por la comisión de infracciones "muy graves" a 66 directivos de cuatro entidades financieras durante 2011, lo que supone casi triplicar las impuestas a 26 directivos de 12 entidades en 2008 por la misma condición.
Así se recoge en la memoria de la supervisión bancaria en España de 2011 que publica el supervisor, tras resolver 52 expedientes a miembros de los órganos de administración y dirección de distintos tipos de entidades. A cierre del pasado ejercicio las entidades sujetas a supervisión prudencial ascendían a 477, de las que 336 eran entidades de crédito.
El Banco de España, valiéndose de su potestad sancionadora como mecanismo para garantizar el cumplimiento de la disciplina de las entidades que operan en el sector financiero, subraya el expediente abierto a un caja y a 40 personas que habían ejercicio en ella cargos de administración.
Tras su resolución, quedó acreditado que dicha entidad había cometido cuatro infracciones, tres de ellas calificadas de "muy graves" y otra de "grave". Ante "deficiencias" en su estructura organizativa y mecanismos de control interno. Por este hecho, el Banco de España sancionó a 38 de los directivos de la entidad.
Además, multó a once cargos de administración o dirección por incumplir el plazo de provisiones exigidas y a otros tantos por permanecer al menos seis meses por debajo del 80% de los recursos propios requeridos.
Por último, se acreditó que la caja había cometido una infracción grave por incumplir normas en materia de límites de riesgos, por lo que sancionó a la entidad y a 21 de sus directivos.
También se multaron a tres entidades por infracciones "graves" y a 28 miembros de administración o dirección, mientras que se impusieron cuatro multas sólo a entidades por la comisión de infracciones "leves", pues no están tipificadas en esta categoría sanciones a directivos.
El número de actuaciones supervisoras realizadas por el Banco de España en 2011 se elevó a 209, de las cuales 71 se encontraban en curso o pendientes de cierre a 31 de diciembre. Estas actuaciones se distribuyen entre visitas tradicionales a las entidades de inspección 'in situ' y actuaciones realizadas en entidades sometidas a un régimen de seguimiento continuado permanente.
