MADRID, 24 May. (EUROPA PRESS) -
El secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, ha ironizado sobre el viaje que el líder de Ciudadanos, Albert Rivera, a Venezuela y ha criticado que el partido 'naranja' haya ido a la capital del país caribeño a "gastar un poquito más de dinero en su spot de campaña" en el que no se "va a hablar ni de España ni de los españoles".
"Da la impresión que Ciudadanos se va a gastar un poquito más de dinero en su spot de campaña, que lo va a rodar en Caracas y que no va a hablar ni de España ni de los españoles", ha dicho el líder 'morado' al respecto de las palabras que Rivera ha pronunciado este lunes al aterrizar en Venezuela sobre que todos los partidos políticos quieren "ayudar al diálogo" excepto Podemos.
En este sentido, ha insistido en que el presidente de C's ha ido hasta Caracas en "calidad de candidato que va a buscar votos". De hecho, ha reiterado en que España es una "democracia suficientemente avanzada" como para "convertir lo que ocurre en un país latinoamericano en asunto de política interna".
Asimismo, ha afirmado que sus relaciones con Venezuela entra dentro de "una cuestión de responsabilidad de Estado", ya que, según ha explicado, al ser candidato a la Presidencia del Gobierno tiene que "tener buenas relaciones con todos los países iberoamericanos". "No digo algo distinto a lo que ha dicho la diplomacia española", ha añadido.
Es más, ha hecho hincapié en que lo "sensato" es "buscar un sistema de mediación" en el conflicto institucional entre el gobierno bolivariano de Nicolás Maduro y la oposición "haciendo caso a los países de UNASUR", tal y como han pedido el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, o el Papa Francisco y ha vuelto a aplaudir el intento de diálogo del ex presidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero.
Por último, ha instado a los "europeístas y los europeos, por responsabilidad de Estado" a estar "más preocupados" por lo que está ocurriendo en Europa, en referencia a la casi victoria del partido de extrema derecha en las elecciones austriacas y a la "amenaza" de que el Frente Nacional de Marine Le Pen pueda "convertirse en el primer partido" de Francia.
