Chantal Maillard afirma que la poesía "debería dejar de ser un juego de salón y ser entonada para un fin concreto"

Actualizado: miércoles, 24 febrero 2010 15:51

MÁLAGA, 24 Feb. (EUROPA PRESS) -

La poeta Chantal Maillard, Premio Nacional de Poesía y Premio Nacional de la Crítica, afirmó hoy que "la poesía debería dejar de ser un juego de salón y volver a sus inicios, es decir, cuando era entonada para un fin concreto, ya sea para la memoria histórica o como conjuro".

En declaraciones a Europa Press, la escritora malagueña, que presenta hoy dos trabajos suyos en la librería Cincoechegaray en su ciudad natal, apuntó que actualmente se muestra "más interesada por los temas, es decir, lo que puede uno decir mediante la voz poética". "Poesía como ensalmo, como conjuro, como lo era antiguamente, con un fin", confesó.

'Hainuwele y otros poemas' (Tusquets) y 'La tierra prometida' (Milrazones) son las dos obras que Maillard presenta hoy en la ciudad malagueña. El hecho de que estos dos libros hayan salido juntos es "una feliz coincidencia", dijo, añadiendo que ambos tratan "la inocencia, el bosque y los animales, y, mientras uno marca el inicio de su andadura poética, el otro, por el momento, el final".

'Hainuwele y otros poemas', que trata de una danza sagrada, según la escritora, es "un reencuentro con el origen, con la inocencia del animal que somos antes de que el mal uso de la mente nos exiliara". Asimismo, indicó que Hainuwele es el nombre de una joven que, en el mito del que proviene, es enterrada viva por los hombres en una danza ritual, mientras en su poemario, está enamorada del Señor de los bosques y su danza es voluntaria entrega al bosque.

Del mismo modo, apuntó que 'Hainuwele' "siempre ha sido el libro más querido y el único del que nunca se arrepintió de haber escrito", siendo ésta la razón por la que aparece ahora "completo y sin retoques" tras su realización en el verano de 1988, en su primera y más prolongada estancia en la India.

Para Chantal Maillard, 'Hainuwele', que se publicó en 1990, se construyó "a sí misma, poema a poema, como lo hacen los personajes cuando se les deja abrirse camino en la escritura, siendo su 'alter ego' más querido".

De otro lado, afirmó que los "otros poemas" contenidos en este libro es una selección de "todo lo que de sus primeros libros quisiera conservar", una selección de poesías pertenecientes a los libros escritos en esa década de regreso a España como 'Poemas a mi muerte', 'Lógica borrosa' y 'Conjuros'.

"UNA LETANÍA PARA LOS SERES EN EXTINCIÓN"

Por otro lado, Maillard declaró a Europa Press que 'La tierra prometida' "no es un libro de poemas, sino una letanía, un memorial para los animales en peligro de extinción". Así, explicó que en el año 2006 el Instituto para la Conservación de la Naturaleza contabilizaba 28.272 especies en peligro de extinción, cuestionándose cuántos individuos caben en 28.272 especies.

En este sentido, señaló que con la letanía quisiera conseguir "un efecto resonancia", es decir, si un ejército puede hacer saltar un puente al pasar sobre él con paso rítmico, tal vez podamos impedir que desaparezcan estas especies". Así, dijo que esta poesía se presenta "como ensalmo, como conjuro, como lo era antiguamente, con un fin".

De este lado, apelo a la capacidad "cordial y compasiva de todos los oyentes y lectores para que le acompañen y añadan nombres a los más de 600 animales que vienen en el libro, y entre todos los pronunciemos, pues es un libro para no ser leído sino para ser sentido y respirado".

'La tierra prometida', que se presenta hoy en Cincoechegaray en Málaga, es "mucho más que un libro, mucho más que un poema cíclico, mucho más que el proyecto de una poeta, Chantal Maillard, y dos artistas, Joan Cruspinera y Josep Bagá", dijo.

La poeta malagueña Chantal Maillard, nacida en Bruselas, en 2004 obtuvo el Premio Nacional de Poesía por 'Matar a Platón' y en 2008 el Premio Nacional de la Crítica por 'Hilos'.