MÁLAGA, 1 Dic. (EUROPA PRESS) -
La Consejería de Medio Ambiente declarará como Monumento Natural de Andalucía cinco elementos singulares de la provincia de Málaga con el objetivo de promover el reconocimiento de sus valores naturales y garantizar su protección y conservación. Entre ellos, se encuentra la Fuente de los Cien Caños de Villanueva del Trabuco, lugar de nacimiento del río Guadalhorce.
Precisamente, el consejero de Medio Ambiente, José Juan Díaz Trillo, ha visitado este jueves esta fuente, de la que ha dicho que constituye "un importante hito geográfico", al ser el lugar de nacimiento del Guadalhorce, el río más largo y caudaloso de la provincia de Málaga, que desemboca en el mar Mediterráneo por su capital.
Con una superficie aproximada de 8,2 hectáreas, se trata de una ladera caliza con numerosas surgencias por las que drena la Sierra de San Jorge y en las que las aguas son recogidas en su parte baja por unas acequias comunicadas entre sí por infinidad de caños.
Díaz Trillo ha explicado que la Fuente de los Cien Caños presenta un buen estado de conservación, destacando por su espectacularidad y belleza, sobre todo en época de lluvias.
Tal y como ha afirmado el titular de Medio Ambiente, se trata no sólo de un espacio de reconocido valor natural, cultural y paisajístico, sino también de "una importante seña de identidad del municipio, que es necesario preservar y dar a conocer, fomentando el desarrollo de actividades de uso público y educación ambiental".
El consejero ha recordado que, además del expediente relativo a la Fuente de los Cien Caños, el Gobierno andaluz está tramitando otros cuatro en la provincia de Málaga, que culminarán, igualmente, con su declaración como Monumento Natural.
OTRAS PROPUESTAS
Se trata de la Cueva del Gato, en el término municipal de Benaoján, y los Tajos del Alcázar, en Alcaucín, ambos propuestos como Monumentos Naturales de carácter geológico, y del nacimiento del río Genal, en Igualeja, y el Mirador Cuenca del Río Turón-Mirador del Guarda Forestal, en El Burgo, de carácter geográfico.
La Cueva del Gato en Benaoján contempla el conjunto formado por la cavidad de salida de las aguas del río Guadares o Gaduares, denominada Cueva del Gato, apelando a su gran valor de carácter paisajístico y sus características geomorfológicas, con aguas permanentes y cristalinas.
La cavidad alberga una de las mayores colonias sedentarias de murciélagos cavernícolas y sus importantes pinturas, tanto en la boca como en el interior de la cavidad, propiciaron su declaración como Bien de Interés Cultural (BIC).
Por su parte, el nacimiento del río Genal, en Igualeja, se produce cuando aflora el agua entre los materiales carbonatados y metamórficos en forma de surgencia y representa una descarga natural del acuífero de Sierra Blanca por medio de una oquedad a modo de cueva.
La vegetación de ribera, que se encuentra bien conservada, sombreando el cauce, está formada por multitud de especies, entre las que predominan los álamos blancos (Populus alba), los olmos (Ulmus minor), los fresnos (Fraxinus angustifolia) o los sauces (Salix sp).
Los Tajos del Alcázar, en Alcaucín, constituyen una muestra singular y emblemática de la geomorfología del Parque Natural Sierras de Tejeda, Almijara y Alhama. Destaca una formación geológica singular, el tajo El Fuerte, con más de 170 metros de desnivel y 500 metros de longitud, lugar inaccesible sólo frecuentado por aves rapaces y cabras, cercano al núcleo recreativo del Alcázar. Igualmente, resalta la vegetación del entorno con la presencia de la flora vascular objeto de interés botánico.
Por último, el Mirador Cuenca del Río Turón-Mirador del Guarda Forestal, en El Burgo, es un paraje formado por una cima u otero de gran belleza paisajística con una ubicación privilegiada a unos 900 metros sobre el nivel del mar, desde el que se divisa la práctica totalidad de la cabecera de la cuenca del río Turón, frente a la vertiente norte de la Sierra de la Nieves, poblada por extensas masas de pinsapar, y que se localiza en el interior del Parque Natural. En su cumbre se encuentra la estatua colocada en 1977 con motivo del centenario de la creación del Cuerpo de Guardas Forestales.
La declaración de estos monumentos naturales implica su inclusión en la Red de Espacios Naturales Protegidos de Andalucía, así como la inscripción en su Registro, de acuerdo con lo dispuesto en el artículo 4 del Decreto 95/2003, de 8 de abril, por el que se regula la Red de Espacios Naturales Protegidos de Andalucía y su Registro.
Díaz Trillo ha subrayado el valor de la figura de Monumento Natural como instrumento que otorga un nuevo impulso a la protección y conservación del medio natural en la Comunidad Autónoma y a la implicación de la sociedad en la defensa y reconocimiento de sus valores naturales.
